Dicho estudio acredita que en los últimos veinte años ha disminuido el número de menores fallecidos en accidentes de tráfico a 60 en 2009 (307 en 1990) y que el número de niños fallecidos en accidentes de tráfico se redujo a 60 en 2009.
La primera causa de muerte accidental o violenta en los menores de 14 años, son los accidentes de tráfico, pero la evolución durante estos años ha sido muy positiva. Las estadísticas que presenta el estudio lo confirman: a finales de los 90, el 50% de los niños fallecidos en España, por causas externas, fue víctima de un accidente de circulación. Diez años después, este porcentaje se redujo al 29% debido, principalmente, a que el número de niños fallecidos en accidentes de tráfico también se redujo en un 25%”.
El uso de asientos o sillas de seguridad infantil, contribuye de forma importante en la reducción de ese porcentaje, lo que ha permitido prevenir entre el 50% y el 80% las lesiones mortales y graves.
Fundación Mapfre cree necesario "reforzar los mensajes relacionados con la seguridad vial, no sólo cuando los niños viajan como pasajeros, sino también cuando se desplazan como peatones”.
Una de las cosas que propone este estudio, es que todos los niños utilicen un sistema de protección adecuado a su edad, pues a pesar de que en los últimos años ha mejorado considerablemente el porcentaje de niños pasajeros de turismos y furgonetas que utilizan algún sistema de retención (un 87,5% en 2008), más de la mitad de los niños fallecidos en accidente de tráfico ese año viajaban sin ningún sistema de protección.
Algo llamativo de este estudio son los motivos que dan los padres para no utilizar estos sistemas de seguridad: trayectos cortos (38%) y pereza (20%).