Son datos que muestran la situación de dificultad que están viviendo un importante número de corredurías españolas ya que, según estimaciones de IMAF, el 90% de las corredurías que funcionan en nuestro país facturan menos de 500.000 euros de comisiones. Es evidente que la evolución de la cifra de negocio del ejercicio 2010 no ha mejorado significativamente y por lo tanto a la conclusión a la que este estudio llega, es que la mayor parte de las corredurías españolas están pasando por situaciones de dificultad y requieren de un trabajo permanente de reactivación de su actividad comercial para compensar el descenso de las primas medias y, al mismo tiempo, un esfuerzo importante de reconducción de sus gastos generales para no entrar en perdidas.