En estos años, ha superado numerosos retos planteados en sus comienzos, entre ellos el crecimiento sostenido y su consolidación como la compañía líder en su lugar de origen (País Vasco). Pero si hay algo que distingue a la aseguradora es su orientación 100% al cliente y al mediador, y la confianza que tienen depositada en ella sus cerca de 375.000 clientes.
En este tiempo, Seguros Lagun Aro ha ido creciendo de forma sostenida, innovando y satisfaciendo las necesidades de sus clientes y mediadores. A pesar de la coyuntura económica, la compañía ha logrado mejorar sus resultados económicos en 2011, con un incremento de sus beneficios un 43,12% con respecto a 2010 (15,6 millones) y de su facturación un 6,75% (211,1 millones).
Estos buenos resultados han sido fruto de la contención del gasto, la reducción de la siniestralidad y la fidelización de sus clientes y mediadores. En definitiva, son la consecuencia de la buena gestión realizada en los últimos años, que ha necesitado de importantes ajustes en su Plan Estratégico 2009-2012 para adaptar sus previsiones a la nueva realidad económica.
En diciembre de 2011, Caja Laboral adquirió el 100% de sus participaciones en Seguros Lagun Aro, lo que mejora la posición de liderazgo de la entidad financiera en cuanto a calidad de servicio y supone la consolidación de una propuesta de valor única para sus clientes, que engloba tanto la satisfacción de sus necesidades financieras como de aseguramiento de familias y empresas.
A partir de ahora la estrategia de la aseguradora estará basada en la búsqueda de la eficiencia a través de la potenciación de su canal de bancaseguros, de la mano de Caja Laboral, y de su canal de mediación.
En 2008, la aseguradora creó la Fundación Seguros Lagun Aro-Mirada Social, a través de la cual canaliza su política de RSC y a la que destina el 3,5% de sus beneficios. La Fundación actúa en tres ámbitos: la promoción del deporte popular como fomento de la salud, acciones para el fomento de la cultura y la puesta en marcha de iniciativas cara a mejorar la calidad de vida de las personas que han sufrido un accidente de tráfico.