“Dentro de la línea estratégica continuamos haciendo progresos significativos hacia el objetivo de tener un negocio centrado y mucho más rentable. Gracias a esta iniciativa, nuestros profesionales pueden actuar de forma decisiva en la prestación de servicios al cliente, reduciendo los gastos generales.”, declaro el CEO del grupo, Martin Senn.
Este nuevo plan sigue siendo objeto de consulta con los empleados y sus representantes, ya que supondría la supresión de cerca de 800 puestos de trabajo en toda la organización global. Se estima que esta estrategia daría lugar a un ahorro anual de costes de aproximadamente 180 millones de euros a finales de 2015.